miércoles, 31 de diciembre de 2014

Argelia | El extranjero | Albert Camus

Argelia es un país del norte de África y ocupa el centro de la región conocida como Magreb, nombre que recibe la parte occidental del mundo árabe. Sus costas son bañadas por el mar Mediterraneo al norte y limita con Túnes, Libia, Niger, Malí, Mauritania, Marruecos y Sáhara occidental.

Es uno de los países con sitios arqueológicos más antiguos del mundo, la presencia humana en Argelia casi limita con las primeras conocidas al día de hoy. Desde el año mil a.C. Comerciaban con Fenicios, Egipcios y Cartagineses. Entre los años 100 y 500 de nuestra era se mantuvo en beligerancia con el imperio Romano que por períodos prolongados controló parte del territorio dejando ciudades de gran valor arqueológico en la actualidad, como es el caso de Thamugadi, llamada la Pompeya del norte de África, por su estado de conservación.

Desde el año 600 comenzó el proceso de islamización del país que fue ocupado por los musulmanes. Este proceso se coronaría con el Califato de fatimí que se extendería desde la parte occidental de la península arábiga ocupando el norte de África hasta el atlántico incluyendo Sicilia (Italia). En 1510 los españoles, que unas décadas antes reconquistaron su país en parte dominado por los árabes, lanzaron un ataque a Argel, con suerte variada se mantienen en la región durante muchos años (incluso hoy día poseen dos ciudades en el norte de África). A partir de 1830 comienza la etapa de dominación francesa, posiblemente la más sangrienta de todas.

Recién en 1965 Argelia obtuvo la independencia mediante un sistema de partido único que terminó en la guerra civil de 1988. Desde 1991 es un estado pluripartidario.

Su capital es Argel, su idioma oficial es el árabe (y algunos idiomas Bereberes, no todos) y cuenta con casi 35 millones de habitantes. Desde 2011 (tras la división de Sudán) es el país más extenso de África.

Bandera de Argelia

El libro seleccionado es el clásico de clásicos "El extranjero" del gran Albert Camus. La edición que tengo es una edición especial en homenaje al centenario del nacimiento del autor (2013) de 155 páginas.

Portada

Albert Camus nació en Mondovi, Argelia Francesa, en 1913. Comenzó trabajando en revistas y, tras problemas para conseguir trabajo tras su desafiliación del partido comunista, se ve obligado a emigrar a París. Reconocido como anarquista apoya casi todas las causas que eran justas para con los obreros (La revuelta en Aelmania oriental en 1953, la revolución Húngara, etc). Sus enfrentamientos con Jean-Paul Sartre en 1952 están hoy día siendo cuestionados por algunos autores, asegurando que no llegaron a un punto tan grave como se suponía. No sólo se limitó a la ficción, fue un gran filósofo y un detractor acérrimo de la religión, como deja bien claro en la obra que nos ocupa hoy.

Falleció muy jóven el 4 de enero de 1960 en un accidente automovilístico, 3 años antes había recibido el premio Nobel de literatura.

Hablando ya del libro, puedo decir que es un clásico indiscutible, no lo había leído antes y no entiendo cómo. Es un pecado no leerlo (no leer el extranjero "es un pecado" es una contradicción para con la obra, si Camus me escuchara posiblemente me insultaría).

Cuenta la historia de Meursault que recibe un telegrama comunicando la muerte de su madre. "Hoy ha muerto mamá" es el comienzo mismo de la historia. El protagonista debe viajar para el entierro y parece más preocupado por los días que debió pedirle a su jefe y las incomodidades el camino que por la pérdida.

Así transcurre toda la historia, para Meursalt es lo mismo el problema que le representa la incomodidad de utilizar una toalla húmeda para secarse las manos, los paseos en la playa con María o los problemas realmente serios que tiene ya superando la mitad del relato. Da lo mismo la muerte, la vida, el sexo, morir ahora o dentro de 20 años, todo es lo mismo, se dice a sí mismo.

El desinterés casi constante del protagonista acercad e todas las cuestiones es casi exasperante. Incluso a medida que sus problemas van en aumento y la situación se vuelve cada vez más dramática Meursault no reacciona. Creo yo que el personaje del capellán que habla con él es un poco el lector que busca la reacción de este extranjero del mundo.

Camus nos cuenta la historia de un hombre que es un total extraño a todo. Capáz de rechazar una oportunidad laboral increible porque París, Argel, el desierto, todo es lo mismo. Capáz también de decir "Me da igual casarme contigo o no, pero si me lo pides lo haré".

Solo muestra algunos indicios de humanidad en momentos muy específicos, está claro su aprecio hacia María, su cariño por Celeste, el dueño del restaurante y su camaradería con Raimundo, pero no va más allá de eso. Pese a estas breves demostraciones, queda claro que le da lo mismo que estén o no en su vida.

Es un libro amoral, totalmente. El protagonista está ajeno al alcance moral de sus actos. Describe con la misma precisión y el mismo desgano los recorridos de los tranvías, el estilo de nado de María, las caminatas en la playa, el asesinato de un hombre, la muerte de su madre, la celda. Una obra corta, sublime, capital.

Tardé mucho más de lo que me hubiera gustado en llegar a Argelia, pero valió la pena. Este viaje, lento pero seguro, me está enriqueciendo la vida.

El próximo país es Argentina, mí país. Hay mucho, muchísimo que aún no e leído. Tengo que seleccionar con cuidado. Hasta el próximo posteo.

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